Te imagino certera y definitiva
como una temporada que tarda en llegar,
como si estuvieras escondida
en las estrofas de un poema.
Te sigo con la mirada y enumero
una a una todas las líneas y las sombras de tu cuerpo,
Con un movimiento cauto, ni fuerte ni dócil,
tu mano recorre mi cuello y sientes mi palpitar.
El cielo podría nublarse y el sol ocultarse eternamente
y no habría aun así motivo de soltarte, de dejarte ir otra vez.
Te quiero entera sin más razón que el deseo,
Te quiero de día y cuando el ocaso acecha tus ojos eternos,
Sin zonas de luz ni sombra, sin pedirte a cambio más que un beso,
Un pacto de silencio que selle nuestras almas,
Una sola voz conjunta que acalle todas las miradas.
No habrás mas recuerdos inconclusos,
más momentos de adolecer la ausencia de tu amor,
Seremos las tardes soleadas, las veredas serenas,
los caminos que abren y proponen nuevos mundos,
Seremos la vibración y la armonía de nuestros cuerpos
y tu jadeante y exhausta de extrañar mis besos
me darás tu amor y te daré todo mi cuerpo.

Abril 2022

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